Por Juan Pablo Ojeda
La jefa de Gobierno de México, Claudia Sheinbaum, anunció este martes que ya se investiga la masacre ocurrida el 24 de junio en Irapuato, Guanajuato, donde al menos diez personas perdieron la vida durante una fiesta patronal por el Día de San Juan Bautista. La conmoción fue aún mayor al confirmarse que entre las víctimas hay niños.
En Palacio Nacional, durante su conferencia matutina, la mandataria detalló que los hechos fueron producto de un enfrentamiento armado. “Sí, lamentablemente ocurrió… en un rato van a enviar información el Gabinete de Seguridad. Es un lamentable homicidio múltiple y se está en investigación”, aseguró Sheinbaum. Reafirmó que aunque hubo un enfrentamiento, la muerte de menores lo hace todavía más trágico.
Además, destacó que se trabaja de manera coordinada con la gobernadora de Guanajuato, Libia Dennise García, así como con las fuerzas federales para esclarecer los hechos y avanzar en los resultados. “Se está haciendo la investigación y se va a seguir trabajando ahí en conjunto… hasta donde se puede”, añadió.
Sobre la situación de seguridad en el estado, Sheinbaum recordó que Guanajuato registró en 2024 el mayor número de homicidios en el país, con 3 151 de los 30 057 casos reportados en México, según el SESNSP. Sin embargo, afirmó que actualmente la entidad muestra indicios de mejora, con una tendencia a la baja en los índices delictivos.
De acuerdo con el reporte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Irapuato, el ataque se dio mientras la gente disfrutaba un baile. Las grabaciones que circulan en redes sociales muestran el momento exacto en que las detonaciones irrumpen la fiesta, provocando escenas de pánico: personas se tiran al suelo y buscan refugio mientras otros huyen despavoridos.
Las cifras oficiales indican al menos diez muertos y varias personas lesionadas por proyectiles. Hasta el momento, no se ha informado sobre detenciones vinculadas con el ataque, lo que aumenta la presión sobre las autoridades para ofrecer avances claros.
Este hecho no solo conmociona por su brutalidad, sino por su contexto: una festividad en la que familias se reúnen a celebrar una tradición religiosa. Sheinbaum dejó claro que el gobierno federal estará vigilante, apoyando las investigaciones y ayudando a garantizar que no haya impunidad para los responsables de este violento ataque en plena calle, en una noche festiva.
